No dejes de luchar y de intentar, porque si lo haces puedes perder tu gran oportunidad.
lunes, 16 de abril de 2012
#Capítulo 22
•Capítulo 22
--Narra Maggie--
Y aquí estoy ahora. Al lado de la persona que quiero. Sin importarme una mierda lo que nos pueda separar en un futuro. El destino que nos espera. Solo una cosa, disfrutar del presente. Y mi presente está aquí. A su lado.
Y es que en tan poco tiempo puedo decir que ya lo estoy amando. Me basto una mirada suya para confundir la noche con el día. Para ser el dueño de mis sueños. Para confundir el tiempo y no saber el día que es. Cada segundo que pase le extrañe. Que mire el calendario y le extrañe. No se como expresarlo. Estoy ilusionada con la melodía de su risa. Sueño con ver su sonrisa cada vez que despierte. Esa preciosa sonrisa que me lleva a otro sitio. Es la primera vez que me importa tanto eso, yo creo que tengo un problema porque jamás había sido así nunca. Quiero que sea lo ultimo que vea antes de irme a dormir para así soñarlo. Quiero tener sitio en primera fila para verlo dormir todas las noches. Es algo inexplicable. Algo que no puedo decirlo con palabras. Y es que aún recuerdo aquel día en el que empezo esto como si lo estuviera viviendo ahora.
--Flashback
-Justin: Llegas tarde -Dice levantandose del banco- Que seas una chica no significa que puedas llegar 15 minutos tarde - Dice sonriendo pícaro-
-Yo: Bueno, que tu seas chico no significa que puedas llegar tan puntual -Digo sonriendo-
Me tedió la mano y la cogí sin temos alguno. Ese temor que habría tenido en otro momento. Ese temor que aparece y demasiado fuerte cuando estoy con el o los de su alrededor. Y hace que me de cuenta de todo lo que pasa a mi alredor. Que esta más guapo que nunca antes. Que sonrie al ver a los niños jugar mientras susurra un 'princesita' casi inahudible. Que las madres están cotilleando sobre mi y él. Pero esta vez se fue. No se a donde. Tampoco sé si volverá. Pero de una cosa estoy segura. Así, a su lado, con él de la mano, me siento segura de mi misma. Me doy cuenta de todo. Qué él está más guapo que nunca antes le he visto. Que al mirar a los niños jugar le brillan los ojos y sonrie de una manera adorable mientras susurra un 'princesita'. Que las madres hablan entre ellas y cotillean cosas que te puedes enterar tú de lo alto que lo hacen. Que ahora mismo querría que se parara el tiempo. Y es entonces cuando gira la cara y sonrie. Esa sonrisa que hace que mis ovarios exploten. Y sin ninguna explicación yo también sonrio.
Para, me suelta y se sube a una moto. Una moto. No pienso subir a una moto. He visto demasiado accidentes. Mi hermano uno de tantos que tube fue grave y todos lo pasamos mal. Su amigo conducia y él iba atrás. En la esquina de mi casa se saltó un 'stop' y justo paso un coche. Golpearon. La moto hizo un caballido y él salió volando a la cera de enfrente. Tal vez si no huiera llevado casco o se hubiera dado con el bordillo en la cabeza no estaría aquí {eso es verdad}. Esa es una de las razones por las que le agradezco a Dios que él tenga un ángel de la guarda que le salve y le guie por el bues camino. Él desde entonces me dijo que nunca montara en una. Siempre bromea con comprarme una pero sé que jamás lo hará y yo tampoco lo permitiré. No pienso subirme ahí para quitarme la vida. Jamás lo haré.
Miré la moto. Miré a Justin. Me quede unos segundos callada mirando a la nada. Volví a mirarle y negué con la cabeza y me eche para atrás. Me giré para irme pero el me paró cogiendome el brazo impidiendo que me pudiera ir.
-Justin: Vamos sube -Dijo soltandome el brazo- Llegaremos tarde.
-Yo: No pienso subir ahí -Dije con miedo. Mucho miedo- No pienso perder mi vida.
Al parecer le hizo gracia lo que le dije y se empezó a reir demasiado fuerte. Haciendo que todos los que pasaran a nuestro lado nos miraran atónitos.
-Justin: No te va a pasar nada -Me cogió las manos haciendo que mirara hacia ella y sonriera por dentro- ¿Confias en mi?-Negue con la cabeza cosa que hizo que sonriera- Pues empieza a hacerlo.
Se quitó su casco y me lo puso. Luego me cogio y me sento en la moto y antes de que yo pudiera reaccionar ya había arrancado para irnos.
(...)
-Justin: Ya puedes bajar -Dijo riendose- Ya hemos llegado.
Abrí los ojos y me baje de ahí. No era tan horroso como yo pensé. Posiblemente no tendría que haber abierto los ojos y haber disfrutado del trayecto. Era agradable ir ahí. Y Justin me dio toda la seguridad que pudo darme.
-Justin: Ven, sigueme- Dijo adentrandose en una especie de bosque.
Me desconcertó. ¿Dónde me iba a llevar llendo por un bosque? Un bosque que no me sonaba de nada. Todo estaba llena de matorrales y cosas así. Cosas que no me gustaban. Nunca sabes lo que te puede salir de allí. Pero es bonito. Es bonito llegar y adentrarte en algo que no sabes lo que vas a encontrarte, con un sueño, encontrar algo grande y valioso. Y allí estaba.Un picnic al lado de un campo de flores precioso. Era irreal ver eso.
Me cogió la mano y me guió para que me sentara. Y así pasamos la tarde. Hablando y hablando hasta que llego la noche. Supe más cosas de él y él de mi.
A él no le importaba la hora que era. Es como si se le hubiera parado el tiempo y solo viviera lo que esta viviendo ahora. Se tumbo en aquella manta morada y se puso a contemplar las estrellas esperando a que pasara algo. Me tumbé a su lado y como imanes nuestras manos se entrelazaron. Sin palabras, sin besos, sin gestos. Solo con miradas nos dijimos todo. Y justo a las 11:11 empezó una lluvia de estrellas fugaces.
-Justin: Cierra los ojos y pide un deseo -Dijo casi susurrando-
Y así lo hice. Cerre los ojos y pedí un deseo. Cuando los abrí aquella lluvia seguía y seguía. Nos quedamos 10 minutos mirandola sin decir palabra, sin mirarnos. Pero nuestras manos seguían entrelazadas. Y como si estuvieramos programados giramos la cabeza a la vez. Y es como una historia de gestos. Sonrio. Sonrie. Me intenta decir algo no le salen las palabras y apreta fuerte mi mano a la misma vez que yo se la apreto a él. Cierro los ojos. Los abro. Se arma de valor y empieza a hablar.
-Justin: Hay veces que el destino te sorprende con cosas maravillosas. Trae a tu vida las personas más hermosas que puedes encontrar -dice sonriendo de una manera adorable- Y hace que cada minuto que pases con ellas te enamores más y más. Tanto que cuando no están contigo las extreñanes hasta el punto de llamarles cada 5 minutos -Dice cerrando los ojos- Que cuando cierras los ojos ves su imagen ahí como una foto. Una foto que se a grabado y no puedes quitarla. -Vuelve a abrirlos- Y descubres que esas personas no se han cruzado por tu camino por casualidad. Sabes que es por algo. Y intentas averiguar ese algo. Y cuando lo sabes, no te quieres separar de esa persona. -Me apreta la mano con más fuerza y la va soltando lentamente- ¿Sabes Maggie? Ahora te estaras preguntando porque te digo esto. Pero todo tiene su razón. -Se levanta y se pone de rodillas haciendo que yo me levante también- Maggie, yo te prometo que jamás te dejaré sola. Jamás me iré de tu lado. Porque quiero que exista un 'tu y yo' entre nosotros. -Me mira y sonrie- Sé que es pronto. Que no nos conocemos. Pero si no cojes las opotunidades de tu camino por miedo a algo nunca sabrás que habrá pasado. -Mira a las estrellas mientras sonrie y vuelve a mirarme- Todas esas estrellas no están por que sí. Están porque tienen algo por lo que brillar. Y yo estoy aquí porque tengo algo por lo que vivir. Y ese algo ahora mismo eres tú. -Escuchar todo esto estaba haciendo que me explotran los ovarios. Coge mis manos y sonrie- Maggie, prometo ser tu Peter y tú serás mi Campanilla. Iremos al fin del mundo juntos. Romperemos los extasis de la felicidad. Pero siempre juntos. Maggie, ¿Quieres ser mi novia?
-Yo: Quiero ser tu Campanilla, tu Alicia, tu Bella durmiente, tu Cenicienta. Sobre todo quiero ser tu novia. Prometeme que esto jamás tendrá final.
Y sin darme tiempo a seguir hablando me besó. Un beso lleno de amor. Dulce, suave, despacio, con cariño. Demostrando que nos queremos. Algo mágico. Bajo estrellas fugaces casí en media noche.
--Fin de flashback
Y ahora sé que lo bueno se hace esperar. Que siempre vienen personas a tu vida de las que creias que jamás ibas a querer. Personas que te enseñan cosas nuevas. Que te enseñan a amar y querer como nunca nadie te a enseñado. Y es entonces cuando sabes que tú vida es la vida que siempre has querido tener. Tienes todo lo que necesitas para ser feliz y que jamás lo cambiarias por nada del mundo. Porque si ahora mismo no estuviera aquí con él. Mi destino sería distinto. Tal vez mejor o peor. Pero estoy segura que no sería igual de mágico que como lo es ahora. Y si ahí una cosa de la que estoy completamente segura, es que lo quiero. Lo quiero mucho. Puedo decir que hasta le estoy amando.
-
-
-
Hola princesitas (: Siento no haber subido antes pero NUNCA os dejéis las cosas para el último día.
Yo mañana ya, empiezo el infierno pero esta semana subiré mucho lo prometo.
Muchas gracias a todas las que dicen más que un siguiente y gracias a las que dicen siguiente.
Os amo mucho lectoras <3
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario