·Capitulo 06

Escuché esa canción.
Me vinieron a la mente tantos recuerdos, que no pude evitar llorar.
De repente, entró mi madre en la habitación, me tuve que tapar la cara con la sábana para que no pudiera ver que estaba llorando, nunca me ha hecho mucha gracia que mis padres me vieran a sí. Prefería evitar preguntas inecesarias como : ¿que te pasa? ¿estás bien? ..
-Mamá: Hija, me voy a hacer compra, te quedas sola en casa. Tu padre se ha ido con Jenni a casa de la abuela, volverán dentro de un par de horas.
-Yo : Vale mamá, si necesito algo ya te llamo. Pero quizás salga por ahí con Rachel...
Mamá: Vale, pero antes de salir llámame para que sepa donde estás.
Se fue de la casa y pude ver desde la ventana como se iba en coche.
Al segundo me llamo Rachel ;
-Rachel : Paso a recojerte a las 7 para ir ¿vale?
-Yo : Vale, pero no tengo muchas ganas de ir...
-Rachel : Te va a venir bien, es mejor que quedarse en casa escuchando música triste mientras que te hinchas a chocolate.
Me quedé de piedra, estaba escuchando música triste y tenía debajo de la almohada un bote de helado de chocolate, pero sólo me digné a responder :
-Yo : Esos no eran mis planes... (se me notó en la voz que estaba mintiendo)
-Rachel : Ya... (en su tono noté que no se lo creía)
Bueno, me da igual cuales sean tus planes, pero tú te vienes conmigo.
-Yo : Venga vale.
Al colgar, me levanté de la cama y vi todas las fotos que tenía pegadas en la pared.
Nate y yo, Nate y yo, Nate y yo... todas eran de él.
Pensé en quemarlas, romperlas, tirarlas... Pero luego me acordé de todo lo bonito que viví con él, de todas esas tardes de verano que pasé a su lado. Pero me vinieron los recuerdos malos, verle en la cama con aquella zorra con el sujetador flojo y no pude evitar gritar. Empecé a quitar todas las fotos con rabia y las quemé todas. La casa se llenó de humo y abrí todas las ventanas.
Me fui al baño para lavarme la cara, y miré el reloj. Marcaba las 6:30.
Corrí a mi habitación y empecé a revolver todo el armario. ¿QUÉ ME PONGO? ¿QUÉ ME PONGO? Aquella pregunta no dejaba de repetirse en mi cabeza. 
No encotré nada y me fui a la habitación de mi madre, cogí lo primero que pillé y me lo puse corriendo.
Volví al baño para peinarme, un poco de rimmel, una coleta y ya está.
"Maggy" -Me gritó Rachel por la ventana, y salí corriendo de casa, cogí las llaves y dejé el móvil en casa.
-Rachel : Que guapa vas ¿no? A ver si encuentras a algún pivón esta noche!
-Yo : Paso de tíos.
-Rachel : Eso dices siempre...
La miré con rabia, tenía razón. Pero esta noche iba a cumplirlo, paso de tíos, son todos iguales al fin y al cabo...
Llegamos a la discoteca. Se llamaba " LOVE 25 " , odié ese nombre. 25 fue el día en el que me dí mi primer beso con Nate de verdad, su recuerdo me perseguía allá a dónde iba.
Nos sentamos mi amiga y yo en la barra y pedimos 2 Wodkas con piña y hielo, necesitaba algo que me hiciera sonreír y nada como el alchol para estos casos.
Empezó a sonar la música, todos se subieron a la pista de baile y empezaron a bailar.
-Rachel : Venga tíaaaaaaaaaaaaa, vamos con ellos! 
-Yo : No tengo ganas, quizás más tarde...
-Rachel : ¿Vas a estar toda la noche con esa cara de culo?
-Yo : Me has obligado a venir... 
Pensé dos veces antes de responderle, no podía pagarla con ella. Al fin y al cabo lo único que había hecho era ayudarme...
-Yo : Venga vamos, que la vida son dos días y vamos a por el segundo! - Grité yo.
La cogí de la mano y nos subimos a la pista, empezamos a bailar hasta que nos cansamos y nos fuimos al baño.
Allí nos encontramos a una chica, que no tardé en reconocer. ¿Sabéis quien era no? sí, aquella guarra que encontré en la cama con Nate.